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La barrera de seguridad de cable metálico es una contramedida común para hacer frente a las colisiones fuera de la vía en carreteras de alta velocidad y constituye una medida por defecto en Australia (Turner 2015). Se ha comprobado que la barrera reduce los accidentes graves y mortales en aproximadamente tres cuartas partes (Crowther y Swears 2010; Candappa et al. 2012; Carlsson 2009; Chimba et al. 2017). Los cables metálicos tensados están diseñados para desviarse en caso de impacto, produciendo así una desaceleración más gradual del vehículo y exponiendo a los ocupantes de este a una energía de colisión menor (Patel, Jani y Joshi 2017). Asimismo, se ha comprobado que las barreras de seguridad de cable metálico (de ahora en adelante WRSB, por sus siglas en inglés) son 1,5 veces más eficaces a la hora de reducir la gravedad de las colisiones en comparación con las otras opciones de barreras actualmente disponibles, que son barreras de hormigón y guardarraíles (Candappa et al 2020). Sin embargo, todavía se observan accidentes graves y mortales en las colisiones contra las WRSB. Dados sus niveles superiores de seguridad, así como la escasa disponibilidad de datos específicos de colisiones contra barreras, hasta la fecha se han publicado pocas investigaciones sobre los factores presentes en los accidentes graves y mortales con presencia de WRSB. Las jurisdicciones de todo el mundo continúan instalando en masa estas barreras. Una investigación centrada en los factores ligados a esta dinámica de colisión hará posible una mejora continua del rendimiento de seguridad de la barrera y de la seguridad vial en su conjunto. Este artículo presenta algunos factores notables identificados en accidentes WRSB graves y mortales en Australia, y pone de manifiesto posibles formas para abordar esta problemática mediante la modificación del diseño de la barrera probada a través de simulación por ordenador.